Hay dos preguntas para poder encontrar la importancia de las relaciones que construimos:

¿Qué tipo de relaciones buscas? y ¿Qué tipo de relaciones encuentras? Ambas partes están conectadas a lo que tu estás dispuesto a dar.

Cada vez que nos relacionamos con alguien nos relacionamos con nosotros mismos. 

Si visualizamos un mar de confusión , encontraremos eso.

Si sentimos amor con solo respirar, brindaremos eso

Si guardamos muchas cosas por dentro, nos responderán con eternos silencios, o discusiones de nunca acabar.

Si damos, esperando recibir, estaremos continuamente insatisfechos, no podemos pretender que nos den algo, que nosotros no estamos dispuestos a dar.

Es preciso hacer una limpieza profunda en la mente y en el alma de manera que las ilusiones vuelvan a entrar, y que la alegría encuentre un lugar donde estacionarse.

Recupera la inocencia y comenzar a creer en uno mismo es el primer gran paso.

Para recuperar la fe, es preciso confiar en uno mismo.

Todo lo que queramos encontrar en nuestras vidas, primero debemos serlos nosotros mismos.

“Para vivir en amor hay que ser amor”